Nuestra tecnología actúa directamente sobre los compuestos odoríferos mediante reacciones REDOX, neutralizando moléculas como sulfuros, amoníaco y mercaptanos, eliminando la causa química del olor.

La tecnología REDOX (reacción de oxidación-reducción) transforma químicamente las moléculas responsables del mal olor al reaccionar con ellas en fase gas. A diferencia de métodos tradicionales que solo enmascaran los olores, REDOX los neutraliza al modificar su estructura molecular, eliminando su impacto olfativo. Este proceso es rápido, altamente eficiente y no requiere grandes inversiones en infraestructura, lo que lo convierte en una solución más práctica, adaptable y sostenible para industrias que buscan reducir quejas vecinales y cumplir estándares ambientales.

Nuestras soluciones están diseñadas con un enfoque sostenible. Utilizamos químicos biodegradables y de bajo impacto ambiental que no generan subproductos tóxicos. Además, al reducir las emisiones de compuestos odoríferos, ayudamos a disminuir la contaminación atmosférica y mejoramos la calidad del aire en entornos industriales.

Los resultados pueden medirse mediante olfatometría dinámica y parámetros como la escala VDI 3882, lo que permite documentar una reducción perceptible de olores en el entorno, incluso en condiciones operativas variables.

No. Nuestros sistemas se adaptan a la infraestructura existente, ya sea mediante difusión directa en ductos, chimeneas, cárcamos o perímetros abiertos. El tratamiento se integra sin interrumpir procesos ni afectar la operación.

El mantenimiento es mínimo. En sistemas automáticos como Smell Meister o Microtec, se realiza una recarga mensual del consumible y verificación técnica del equipo. Esto puede incluirse en un servicio full service.

Full Service es un servicio integral que incluye la instalación de los equipos de difusión, suministro mensual de consumibles, mantenimiento preventivo y correctivo, visitas técnicas programadas y seguimiento continuo para asegurar la efectividad del tratamiento olfativo, sin necesidad de inversión inicial en infraestructura por parte del cliente.

A diferencia de tecnologías de gran inversión como scrubbers o biofiltros, nuestros sistemas actúan en fase gas, con instalación simple, menor costo operativo y resultados inmediatos en reducción de olores, especialmente en espacios abiertos o variables.

Los efectos son prácticamente inmediatos. En condiciones normales, la reducción del olor puede percibirse en minutos tras la aplicación o activación del sistema, y se mantiene mientras se mantenga la dosificación.

Sí. Podemos realizar una prueba técnica controlada durante un período de hasta dos meses, en una zona crítica, para que evalúes resultados antes de adquirir o contratar el servicio de forma permanente.